lunes, 22 de marzo de 2010

Al fin y al cabo...

Noches enteras, constantes invitaciones a tu estudio-casa, tu serías el fotógrafo, "al más puro estilo indie", te veía sentado junto a la ventana mirando la lluvia, esperando la escena perfecta para capturarla, un día decidiste decir adios para siempre, había una marcada tensión (...), que no le convenía a ninguno, no podíamos afectar a nadie, aunque 'muy en el fondo',

'algo tuvo que surgir en algún momento de donde no había nada de nada...'

... regresaste 1 año después, venías como yo, arrastrando esa tensión ahora mayor, cada vez era más difícil, cada vez sentía más cerca el día en que le romperíamos la madre a todo; cuando ese día llegó decidí decir adios para siempre. Cobarde huida, ya se, pero no había otra forma. Tu espacio quedó en blanco, murió.


Un año más...

El espacio despertó de la nada, "dónde se habrá metido?", escuchaba al viento mover las hojas del árbol. Dos días después me regresaste mi pregunta "dónde te has metido? :( ".

'Deja te conecto'